jueves, 31 de diciembre de 2015

El "evangeliario" papal de Navidad


Durante el Tiempo de Navidad en las misas papales se pone un libro abierto frente al altar, y delante del volumen la imagen del Niño Jesús. Este libro es llevado en la procesión de entrada y se usa para leer el Evangelio, como si fuera un evangeliario. Pero no es un Evangeliario, sino un misal.

En efecto, hasta antes del Concilio Vaticano II solo existía un libro litúrgico: el misal, que contenía, el ordinario, los propios y las lecturas de la misa. Tras la reforma litúrgica se separó el misal (con las oraciones de los propios y el ordinario) del leccionario (con las lecturas) y el Evangeliario.

El libro que aparece en las misas papales es un misal elaborado exclusivamente para el Tiempo de Navidad por encargo del papa Alejandro VI en el Jubileo del año 1500, y en el que aparecen los textos del Evangelio de las misas de este tiempo.


El misal de navidad de Alejandro VI fue ilustrado por el arista milanés Antonio de la Monza, e incluye también la forma en la que el papa se debe preparar para la misa, los ornamentos e insignias que debe de portar, y las notas musicales de las partes que deben de cantarse. Se encuentra habitualmente en la Biblioteca Vaticana, y sólo es usado en las celebraciones litúrgicas de ese tiempo.

miércoles, 30 de diciembre de 2015

Dos diáconos incensando


Mañana el papa Francisco presidirá las Primeras Vísperas de la Solemnidad de Santa María, Madre de Dios y el canto del Te Deum por el fin del año 2015. En esta celebración se producirá un rito especial: la incensación del altar por dos diáconos a la vez.

Cuando el papa preside el solemne rezo de las vísperas, en el momento en que se entona el Magnificat dos acólitos con dos incensarios se acercan al Santo Padre, quien le pone incienso a ambos. Luego, los acólitos se los entregan a dos diáconos quienes inciensan a la vez el altar. Los dos diáconos llegan al centro del altar y, a la vez, inciensan la cruz. Después uno inciensa hacia la derecha y otro hacia la izquierda, encontrándose de nuevo en el centro del altar, pero del lado contrario, y regresan al lugar original incensando nuevamente su lado del altar.


Aquí el video de esta incensación doble durante el canto del Magníficat:


martes, 29 de diciembre de 2015

El anuncio de las fiestas móviles


El próximo domingo en algunas regiones, como México, se celebrará la Solemnidad de la Epifanía del Señor. En otras regiones, como Italia o España, la Epifanía del Señor se celebra el 6 de enero. En la Santa Misa de la Epifanía puede realizarse un rito especial, que es el anuncio de las fiestas móviles del año.

Después de que el diácono proclame el Evangelio, y antes de la homilía, se hace el anuncio solemne de las fiestas movibles de 2016. Este anuncio, que se encuentra en el Misal Romano, puede ser leído o cantado.
El texto del anuncio es el siguiente:

“Queridísimos hermanos,
con el favor de la misericordia de Dios,
así como nos hemos alegrado
por el Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo,
les anunciamos la alegría de la Resurrección de nuestro Salvador.

El día 10 de febrero será el día de las Cenizas, comienzo del ayuno de la Sagrada Cuaresma.

El día 27 de marzo celebraremos con alegría la Santa Pascua de Nuestro Señor Jesucristo.

El día 8 de mayo, la Ascensión del Señor.

El día 15 del mismo mes, la fiesta de Pentecostés.

El día 26 del mismo mes, la fiesta del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo.

El día 27 de noviembre  será el primer Domingo del Adviento de Nuestro Señor Jesucristo, a quien sea el honor y la gloria por los siglos de los siglos.

R. Amén.”

El texto en latín lo pueden ver aquí. 


miércoles, 23 de diciembre de 2015

De rodillas en el Credo


En el rezo o canto del Credo hay que inclinar la cabeza durante las palabras “y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María Virgen y se hizo hombre”. En la Solemnidad de la Natividad del Señor, en esas palabras hay que arrodillarse en vez de inclinar la cabeza.


El año pasado, en la Misa de Navidad que celebró el papa Francisco se cantó el Credo en gregoriano, pero se interrumpió este canto en  las palabras en que todos deben de arrodillarse, en que se cantó la versión de Mozart. Terminando esta frase, siguió el Credo III.


Aquí el video: